Volver a casa – La historia de Mugendi
Mugendi es un agricultor keniano. Casado y con dos hijos, vive en un pequeño pueblo en el Condado de Tharaka Nithi. A lo largo de los años ha pasado por cambios desafiantes en el clima de su región.
La cantidad de precipitaciones que hemos tenido ha sido inferior a la normal. El tiempo es más caluroso de lo habitual y los patrones son impredecibles”, decía.
Las continuas rachas de sequía y la ausencia de precipitaciones en las temporadas de lluvias estaban destruyendo los cultivos. Mugendi se vio forzado a abandonar su tierra y buscar empleo en otro lugar. Encontró trabajo como supervisor en un hotel pero era un puesto muy mal pagado.
Sin embargo, en 2013, Mugendi pudo emprender el viaje de regreso a su tierra cuando se unió al Programa de Cáritas para la Recuperación de las Tierras Áridas y Semi-Áridas de Meru.
El programa ayuda a la comunidad a mejorar el suministro de alimentos mediante la adaptación a los cambios climáticos. Todos juntos, crearon un sistema de riego que conectaba quinientos hogares dentro de la comunidad, incluido el de Mugendi. Esto le dio acceso a la familia al agua que tanto necesitaban.
Los agricultores que están dentro del programa también aprenden técnicas de adaptación al clima cambiante en el que viven, tales como la utilización de semillas resistentes a la sequía y técnicas de cultivo sensibles al agua, así como la siembra de diversos cultivos. Mugendi también aprendió el “control de plagas de diferentes cultivos, las épocas de siembra y de cosecha, (y) la poda”.
Dotado de nuevos conocimientos y técnicas, Mugendi pudo regresar a su tierra y aplicar cambios efectivos en sus prácticas agrarias.
Como resultado del programa, ahora estoy desarrollando la agricultura de regadío y aplicando técnicas agrícolas de conservación. Hemos cambiado el tipo de cultivos que plantamos”.
Hoy, su tierra le aporta una fuente de ingresos. Puede alimentar a sus hijos y pagarles una buena educación. “Ahora puedo llevar a mi hijo a un internado privado”.
Mugendi todavía teme los efectos del clima cambiante pero está encantado de haber vuelto a trabajar su tierra mediante prácticas sostenibles y con una seguridad financiera. “Este programa me ha cambiado la vida”.
Por Avril Janks, Cáritas Australia