Partiendo de dos cochinillos para llegar a cosas más grandes en la India
A tan solo 18 años, Shiva Ram Kisan ha experimentado muchos más altos y bajos, que otras personas en toda una vida. Perdió a su madre, cuando solo tenía 5años y a su padre con 14. La soledad, la pobreza y el estomago vacío, son experiencias muy ‘familiares’ para él.
Sin embargo, partiendo de un humilde pasado, Shiva ahora está felizmente casado y es un pequeño agricultor y ganadero, con éxito en su trabajo, admirado y respetado por sus vecinos, de la localidad de Sundridih, en el estado oriental de Jharkhand (India): “Es muy doloroso para mi recordar lo que me ha pasado, aunque cada día me digo también que no hay nada imposible en la vida. Si uno tiene confianza en sí mismo, puede lograrlo. Y eso es lo yo que le digo siempre a la gente”.
Shiva está también muy agradecido a Caritas India, cuyo proyecto de capacitación en agricultura y el pequeño regalo de ‘puesta en marcha’, dos cochinillos, le dieron la oportunidad de superar sus dificultades. Shiva había tenido que pedir dinero prestado para poder enterrar a su padre. Luego, para pagar su deuda, tuvo que dejar de estudiar y trabajar como servidumbre. Eso significa que le pagaban con la comida, en la familia para la que trabajaba. Pero Shiva dice: “Al menos 6 veces al mes, todos los meses, me iba a la cama con el estómago vacío. Tan pronto como pude, me fui a trabajar construyendo carreteras – la paga era escasa, pero al menos era una paga. También encontré una pequeña parcela para poder cultivar alimentos para nutrirme”.
La aldea nombró a Shiva como beneficiario del programa de Caritas India, el principio se convirtió en movilizador de la comunidad y luego recibió la capacitación en agricultura y los dos cochinillos. Cuando consiguió las primeras ganancias de su granja porcina, inteligentemente, Shiva invirtió en poner un techo a la misma. Él y su esposa, Sumitra, que también tiene 18 años, tienen ahora 10 cerdos y han empezado a criar vacas y cabras. También han comenzado con la agricultura orgánica, sembrando hortalizas, como berenjenas, tomates y calabazas, fruta como lichi y granadas, y especias, como chiles y cilandro.
Shiva y Sumitra se han comprado últimamente una moto de segunda mano. Como las mejores técnicas agrícolas que aprendieron, con la capacitación de Caritas India, les da ahora lo suficiente para poder vender, con la moto, llevan sus productos al mercado con mayor facilidad: “Estoy muy feliz de poder trabajar en colaboración con mi esposa Sumitra. Ella me ayuda con el trabajo y ahora comemos tres veces al día. Somos autosuficientes”, afirma Shiva.
Caritas India ha capacitado ahora a Shiva para la producción de ‘lac’ – una resina natural, dura y biodegradable, producida por un insecto de plaga que prospera en la tierra degradada. La pequeña larva roja de estos insectos secretan un fluido denso, que hay que recuperar y dejar secar. La resina se utiliza en la industria eléctrica y farmacéutica e incluso para conservar especímenes en arqueología y zoología . Shiva indica: “Desarrollándose en la maleza, esta resina ‘lac’ es perfecta como actividad e ingresos de reserva, en caso de inesperadas dificultades. Se necesita poco tiempo, poca agua y poco dinero, para su producción. Sumitra y yo estamos añadiendo esto como respaldo a nuestro plan de cultivos, por si hubiera una sequía. Sin embargo, yo ni siquiera podría hacer todo esto, si no hubiera sido por los dos cochinillos de Caritas India. Con muy poco, se pueden conseguir grandes cambios”.